“Y el rey les
respondió ásperamente; pues dejó el rey Roboam el consejo de los ancianos. Y les habló conforme al consejo de los
jóvenes, diciendo: Mi padre hizo pesado vuestro yugo, pero yo añadiré a vuestro
yugo; mi padre os castigó con azotes, mas yo con escorpiones.”
2 Crónicas 10:13-14 RVR
Roboam escucho el
consejo de jóvenes ¿tú a quién escuchas? Reflexiona. Es muy común escuchar a
los que nos rodean y por tanto ser influenciado, a tal punto, de tomar
decisiones basados en lo que nos dicen. Y aunque todos tus amigos lo hagan, tú
debes formarte un criterio, significa que debes tener argumentos a favor, en
contra, ver consecuencias o beneficios de lo que piensas o quieres hacer.
La Biblia a
través de estos versículos muestra el error de Roboam, pues a pesar de que oyó
ambos consejos, se inclinó por los de sus amigos jóvenes, escuchó a su mente
joven e inexperta y creyó que era lo correcto. Ten cuidado no sólo de
escuchar las opiniones de otros, sino que elijes, ya que debes de escoger lo mejor para ti, para tu familia y
para aquellos que te rodean.
Quien
irrefutablemente te puede dar un consejo certero y perfecto es Dios, puedes
preguntarle y estará siempre dispuesto a oírte y a contestar sabiamente tus
dudas o preguntas. El consejo está en su Palabra, lee continuamente y verás cuanta sabiduría y experiencia brotan
de sus páginas.
Por lo joven que
eres, te enfrentarás a tomar una serie de decisiones de suma importancia, así
que consulta a la gente correcta, con
experiencia: tus padres, maestros, consejeros, pastores y a Dios. Escucha y
aprende.
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